Mis primeros pasos para participar en remates Judiciales
Las tres reglas de Oro para participar en un remate:
1–No asistir nunca a un remate sin haber visto la casa, ubicación y zona donde está.
2–No Asistir a un remate sin antes haberle hecho un estudio registral.
3–No asistir a un remate sin haberle hecho un estudio del expediente Judicial.
El Trípode de oro: Los tres NO que debes cuidar antes de participar en un remate.
Mis primeros pasos en casas en Remates
¿Por qué hay poca información de las propiedades en Remates?
En los medios no hay mucha información respecto a estos negocios, pero nadie se ha atrevido a proporcionar información clara acerca de este tema.
Casas en Remates nos hemos dado a la tarea a divulgar la mayor información posible al respecto para ayudar a los inversionistas y familias a atreverse a participar de este fructuoso negocio y tener casa propia a mitad de precio.
La información oficial de las casas que están llevando un proceso de remate está en el boletín judicial estos son publicados todos los días hábiles. En su efecto Casas en Remates le hemos hecho las cosas fáciles para su selección, hemos creado un planificador anual (ir al Planificador anual) de todos los edictos que salen en el Boletín Judicial, copia fiel de los mismos.
También ante la pregunta ¿Qué tengo que hacer exactamente para adjudicarme una casa?, hemos creado una guía completa de todo el proceso.
¿Por qué hay poca información de la propiedad para ubicarla?
En esto la información, aunque se ve que es poca, pero vemos que es exacta, con ella y con los conocimientos adecuados podemos localizar la casa que está en el proceso de remate.
Mi recomendación es que entre muchos profesionales que saben de esto, están los topógrafos, puedes contratar los servicios profesionales de ellos para dar con la ubicación exacta de la casa.
Lo básico de los Remates Judiciales.
Las propiedades se sujetan a un remate o subasta judicial para que se logren vender y poder cubrir una deuda no pagada. Estas se venden por medio de subastas públicas en los Juzgados.
Para participar en una subasta judicial se ocupan el dinero a mano, en cheque o efectivo. El día del Remate hay que llevar el 50% de la base y si eres el mejor postor entonces pagas el saldo de la apuesta en el acto, o cancela en tres días hábiles el mismo.
Ahora si es un remate de una mutual esto cambia, hay que presentar el 40% en el acto para participar y si eres el mejor postor debes pagar en el acto el saldo ofrecido.
El día y la hora indicada en el edicto, llegas como máximo 15 minutos antes de la hora indicada, a la puerta del juzgado iniciado y esperas que salga el o la juez o el auxiliar, el cual dice lo siguiente… “Remate de las X horas” o “Interesados para el remate de las 11:00 horas” él o ella hacen el llamado. Te acercas, y el o la juez o auxiliar hacen lectura del edicto (Que es un edicto) cuando termina él o ella dicen “postores” y es allí donde te acercas con el dinero y con la cédula o pasaporte a título personal o jurídico, lo entregas. Aquí le dejo un video que lo que tiene que hacer el día del remate, sencillo pero puntual.
Estos negocios sirven como método de inversión porque dada la forma como se llevan a cabo implican un proceso que muchas veces ahuyenta a los inversionistas más conservadores, permitiendo que los más audaces aprovechen los bajos precios.
En un remate judicial, una propiedad se compra entre un 50% a un 60% de su valor real, lo que hace de esta una operación viable para los interesados en adquirir una propiedad o para comprar a mitad de precio.
El hecho de contar con asesoría legal de un profesional en remates le otorga a la operación de adquisición y posesión del inmueble una garantía mayor. El soporte del abogado especialista le permitirá conocer los pormenores legales del inmueble y la viabilidad de la operación.
El criterio legal es un requisito indispensable para conocer los riesgos y obligaciones que tiene una propiedad después de adjudicada.
Recomendó contratar los servicios de un abogado para tal fin, ya que la seguridad en la inversión es prioridad, “no todo lo que brilla es oro”
Lo básico de los Remates Bancarios
Para recuperar el crédito moroso, los bancos recurren a la venta de créditos, o en su caso, de inmuebles para lograr la pronta recuperación del dinero prestado. Estos son los remates bancarios. Los bancos los hacen directamente, o bien, se practican a través de despachos jurídicos dedicados a la venta de los mismos.
De estos últimos existen tres tipos, de acuerdo a la etapa del proceso legal donde se encuentre:
Los que se encuentran entre la demanda y la preparación del remate, llamados cobros judiciales. En estos asuntos, se compra al banco el crédito que existe a su favor, la garantía hipotecaria y el juicio que se ventila en contra del deudor. NO SE COMPRA LA PROPIEDAD EN CONCRETO. Estas operaciones se llevan a cabo ante notario público o en el juzgado en donde se ventila el juicio.
Los que ya fueron subastados o adjudicados y aún no se realiza la escritura, que se llaman cesiones de derechos adjudicatarios. En estos, prácticamente se compra el derecho que tiene el banco para escriturar la propiedad legalmente (pues el comprador se convierte en el propietario ante el deudor), y esta compra se debe formalizar ante notario público, y solo queda pendiente la toma de posesión del inmueble.
Los que se encuentran en la penúltima etapa (escrituración), en los cuales el banco puede tener o no la posesión de la propiedad, conocidos como compra-venta. En estos casos, el banco ya es el dueño ante cualquier persona, y puede que solo quede pendiente la posesión del inmueble.
Como los remates bancarios entran en un proceso legal, mientras más avanzado se encuentre, el banco eroga más gastos, por lo que es preferible comprar en etapas iniciales (la propiedad puede ser adquirida al precio más bajo).
¿Por qué es un buen método de inversión?
Los remates se adquieren solo mediante operaciones en efectivo, en virtud de que se requiere disponer del dinero en plazos muy cortos que imponen los jueces. Esto en tres día según la ley de cobros judiciales, 8624, y en el acto, según la ley 7052. Del Sistema Financiero Nocional.
En un remate judicial, una propiedad se compra entre un 50% a un 60% de su valor real, lo que hace de esta una operación viable para los interesados en adquirir una mejor vivienda o para invertir de manera segura.
Ya que los remates judiciales son procesos regulados por las autoridades dentro de los juzgados, la inversión nunca corre el riesgo de perderse. Ya que al final o se adjudica la propiedad y si declaran nulo el remate recuperas en dinero.
Los rendimientos derivados de esta clase de operaciones pueden superar prácticamente cualquier otro tipo de inversión disponible en el mercado. La ganancia puede llegar a ser hasta del 40% de lo invertido a corto, mediano y largo plazos.
Además, la inversión inmobiliaria no depende en ningún momento de los vaivenes de la situación económica del país.
¿Por qué es conveniente comprar una propiedad mediante un remate?
Existe una gran variedad de inmuebles puestos a la venta en remates judiciales o remates bancarios, que permite a los interesados poder contemplar la adquisición de terrenos, casas, departamentos y hasta residencias con precios castigados, en mejores zonas, más seguras y más grandes.
¿Quiénes pueden adquirir un remate?
Cualquier persona puede participar en un remate.
Nuestra cartera de clientes es una muestra de la diversidad profesional y comercial entre distintas personas que invierten con seguridad en los remates con Nosotros.